El dengue en tiempos de COVID-19

Desde el 2017 sufrimos la peor epidemia del dengue cuando los casos llegaron a 68 290 con 89 fallecidos y el año pasado las cifras llegaron a 51 678 casos con 88 fallecimientos, estadísticas obtenidas del Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades, perteneciente al Ministerio de Salud (MINSA), entidad que, en diciembre del 2020, indicó que el Perú era el tercer país de América Latina y el Caribe con la mayor tasa de mortalidad por dengue.

En alerta epidemiológica

El MINSA declaró hace unos días en alerta epidemiológica a 14 distritos de Lima ante el registro de nuevos casos de dengue, debido a que existe un incremento del 34% a nivel nacional en el número de casos en comparación con las mismas semanas del 2020.

En el caso de la región Callao se notificaron 37 casos probables de dengue, de los cuales 15 fueron confirmados, 10 descartados y 12 casos probables, según señala la Dirección Regional del Callao. Así mismo se supo por esta entidad que el grupo etario más afectado es el adulto con 7 casos, seguido del joven con 5 casos y en último lugar el niño con 3 casos.

Unida a la crisis por la Covid-19, el país tiene que lidiar con esta epidemia realizando fumigaciones y haciendo un llamado a la población a una cultura de prevención para evitar la propagación del dengue. Se sabe que esta es una enfermedad vírica propagada por el mosquito Aedes Aegypti principalmente en zonas tropicales y subtropicales del mundo.

Cuando un mosquito pica a una persona infectada con un virus del dengue, este ingresa al insecto terminando infectado para luego picar a una persona probablemente sana a la cual le ingresa el virus por medio del torrente sanguíneo. Los síntomas se presentan, por lo general, entre cuatro y siete días después de la picadura de un mosquito infectado. Algunos síntomas son parecidos a la gripe como fiebre, dolor muscular, dolor de articulaciones, además de sarpullido y dolor de ojo. En casos más graves puede haber sangrado severo, deterioro de órganos y/o pérdida de plasma.

¿Cómo prevenirlo?

La prevención es la mejor forma de evitar la propagación del dengue, por ello la Lic. Libia nos brinda las siguientes recomendaciones:

– Desecha cualquier objeto que no uses y que pueda almacenar agua.
– Lava y escobilla los recipientes donde almacenas agua.

– Tapa herméticamente los recipientes donde almacenas agua, asegurándote de no dejar ningún espacio abierto para el ingreso del zancudo.

– Elimina objetos que no usas y que pueden almacenar agua, como baldes, chapitas, tapas, zapatos viejos, llantas, botellas, etc. Que pueden convertirse en criadero del zancudo que transmite el dengue.

– Si tienes maceteros o plantas acuáticas, lava al menos cada dos días sus recipientes, para evitar la formación de criaderos del zancudo en esos objetos.

– Voltea o pon boca abajo los recipientes que podrían almacenar agua y que usas a diario, como: baldes, bebederos o platos de mascotas, lavatorios, entre otros.

Es importante prestar atención a los síntomas y no te automedicarse. Lo mejor es acudir o llama al establecimiento de salud más cercano para recibir atención inmediata.

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