Vidawasi recibe a su primer grupo de turismo filantrópico
Vidawasi, la ciudadela de salud infantil que busca descentralizar la atención médica pediátrica en Perú, ubicada en el corazón del Valle Sagrado, en Urubamba, Cusco, recibió por primera vez a un grupo de turistas conformado por 22 personas provenientes de diferentes ciudades de Estados Unidos, destacando la presencia de la Sra. Anne Lorimar, quien es la persona de mayor edad que ha escalado dos veces el Kilimanjaro. Esta visita, que fue posible gracias a la empresa K2 Adventures en coordinación con Lima Tours, tuvo como finalidad, incorporar e impulsar el turismo filantrópico para la autosostenibilidad de la ciudadela, favoreciendo también a su entorno.
Los visitantes, complementaron su paso por Machu Picchu, una de las maravillas del mundo, con un full day en la ciudadela Virgen de Vidawasi o Vidawasi, durante el cual pudieron conocer su historia, recorrer sus instalaciones e interactuar con el huerto orgánico implementado para la autosostenibilidad de la ciudadela. Así también, recibieron una clase demostrativa de cerámica ancestral de parte del maestro Gonzáles (reconocido ceramista de la zona) y pudieron complementar esta experiencia vivencial con música, danzas y artesanía, típicos de Urubamba.
Al concluir el full day, la representante de k2 Adventures, quien lideró el grupo de turistas, manifestó que se sintieron en un ambiente de completa hospitalidad y que estuvieron muy honrados y agradecidos de que su visita pueda contribuir con la obra de Vidawasi, principalmente con el avance de la construcción del hospital de alta complejidad destinado a atender a niños con enfermedades poco comunes y/o mortales.
Cabe resaltar que Vidawasi es una de las iniciativas pioneras y más innovadoras en Latinoamérica, con respecto a la salud para niños en condición de vulnerabilidad. Es por ello, que promover el turismo filantrópico en la ciudadela; es decir, que los turistas elijan pasar parte del tiempo de su viaje en las instalaciones del lugar, involucrarse con la causa y asegurarse de que el dinero que deseen gastar llegue de forma directa a donde ellos decidan, contribuye directamente a la autosostenibilidad de la organización y fomenta la generación de oportunidades laborales para las familias de las comunidades aledañas y con ello, mejorar su calidad de vida.
