¿Qué necesitamos para salir de la cuarentena?
El presidente del Perú, Martín Vizcarra, ha ampliado por 14 días más el periodo de cuarentena, siendo probablemente el 10 de mayo el último día de esta medida; ante ello se presenta la interrogante de ¿qué es lo que se requiere en temas de salud para levantar el aislamiento social?
El documento Ruta en Desarrollo Nacional, de IPAE Asociación Empresarial y el Consejo Privado de Competitividad, responde a esta pregunta y recomienda que el sistema de salud trabaje en tres frentes: detección, diagnóstico, aislamiento y seguimiento de contagiados; distanciamiento social y toma de conciencia de la ciudadanía.
En cuanto a detección, aislamiento y seguimiento de contagiados, refiere que es prioritario identificar a los contagiados para su aislamiento y evaluación de posibles contactos que estuvieron expuestos, para lo cual se necesita una mayor cantidad de pruebas moleculares; solo así se podrá detectar a los asintomáticos y proceder a su aislamiento para que no contagien a otros. Es importante tener un equipo especial de búsqueda y compra de las mismas, así como lograr un trabajo conjunto con laboratorios privados que puedan ampliar la capacidad de aplicación y análisis de los test moleculares por día.
En tanto, es recomendable reforzar el mensaje de que todo sospechoso debe aislarse para evitar el riesgo de contagiar a otros. Es decir, dadas las limitaciones de aplicar pruebas diagnósticas masivamente, disponer el aislamiento de todo aquel sospechoso de contagio. Si alguien se toma una prueba, debe aislarse. Si se trata de una serológica y fue negativa, también debe aislarse hasta que una semana después otra serológica confirme el resultado inicial.
En cuanto al aislamiento, se propone que aquellos que no se encuentran en situación grave descansen en sus casas, separados del resto de sus familiares, bajo el concepto de cama clínica domiciliaria; sujetos a un constante monitoreo y seguimiento por parte de la autoridad sanitaria.
Identificar los últimos movimientos de los pacientes infectados, lugares a los que fueron, personas con las que tuvieron contacto, entre otros, para definir quiénes más se habrían contagiado y los lugares que fueron expuestos al virus. Esto se puede apoyar en la tecnología, tanto para la identificación de pacientes con entrevistas por teléfono y/o internet, como para la difusión de información a través de mensajes de texto o APPs.
Brindar el equipamiento necesario al personal de salud -el que está en constante riesgo-, aplicarle pruebas de diagnóstico y, en general, darle un adecuado soporte para el desempeño de su labor. Debe formularse planes de contingencia para sustituir a los trabajadores en caso se contagien; es imprescindible cuidar a los cuidadores. Y otras medidas a tomar en cuenta son: la toma de temperatura masiva a la entrada de oficinas que siguen trabajando y locales abiertos al público.
Una medida fundamental es incrementar la cantidad de camas UCI con respirador para que el sistema de salud pueda atender todos los casos graves que se presenten; en el corto plazo, apoyar la fabricación local de prototipos que vienen validando la Marina y universidades, así como la habilitación de respiradores que están en desuso. Y buscar apoyar en organismos internacionales para una compra grande. Apuntemos a 2000 respiradores en dos meses.
Con respecto al distanciamiento social, se propone cuarentenas selectivas, la actividad económica debe reactivarse de manera progresiva, por ello se sugiere una reactivación de labores por rubros y zonas. Se recomienda que las personas de mayor riesgo (más de 65 años y con enfermedades crónicas) permanezcan en aislamiento hasta que la probabilidad de contagio se reduzca.
La apertura parcial de los sistemas de transporte manteniendo el distanciamiento de metro y medio entre las personas, en que se aplique un sólido protocolo sanitario.
Uso masivo de mascarillas: es importante que todo paciente contagiado las use y que se promueva que los que no tienen el virus también las utilicen en caso tengan que salir de casa.
Protocolos sanitarios en todo espacio que esté operando o vaya a operar: Las organizaciones deben establecer lineamientos para disminuir el riesgo de contagio en sus instalaciones, por ejemplo, incluir la toma de temperatura a trabajadores y a clientes, realizar pruebas a los colaboradores, la continuidad de trabajo remoto y la limpieza y desinfección constantes. Urge aprobar protocolos para transporte público y mercados tradicionales.
Y sobre Toma de Conciencia, es importante considerar la higiene y distanciamiento: Redoblar esfuerzos en resaltar la necesidad de fortalecer la higiene como el lavado de manos, cubrirse con el codo o con un pañuelo al toser, uso de mascarilla, evitar tocarse ojos, nariz y boca; y del distanciamiento social, a metro y medio de distancia. Un mensaje clave es que se trate a todos como si estuviesen contagiados, y se tomen medidas para evitar que nos contagien.
También es necesario crear conciencia en la necesidad de aislarse en caso de contagio o riesgo de estarlo, y avisar a los contactos que pudieran haber sido afectados. Inaceptable que algunos se tomen la prueba y sigan haciendo su vida como si no pasara nada.