Perú será la nueva sede de certificadora sostenible
Las políticas anticorrupción y la implementación de estrategias sostenibles y sustentables en las empresas cobran cada vez mayor importancia. Por un lado, se debe a que las nuevas generaciones son más conscientes del impacto ambiental que se genera y buscan firmas que tengan un ADN verde, pero también porque la implementación de políticas transparentes y responsables le permite a la compañía mejorar reputacional, económica y ambientalmente.
IASE, presente en más de 34 países, ha logrado que más de dos tercios de la población mundial se interese en las certificaciones en ESG (Environmental, Social and Governance), herramientas fundamentales para el crecimiento corporativo sostenible de las empresas y de la creación de valor para sus accionistas y para la sociedad en general, convirtiéndose en la primera y única asociación a nivel mundial en dar certificaciones de este tipo. Según expertos, los criterios ESG ayudan a incrementar el retorno de la inversión, reducir costes y promover una estructura organizativa más sostenible y con los más elevados estándares éticos.
«En IASE Perú consideramos que nuestro país, al ser uno de los países más vulnerables al cambio climático, permitirá que los interesados en certificarse puedan obtener un alto valor de retorno al obtener estas acreditaciones porque permitirá mejorar la imagen de la empresa, implementar estrategias corporativas responsables y sostenibles, obtener herramientas para generar una financiación más eficiente, aprender a reducir costes energéticos, del tratamiento de agua y de residuos, entre otros. En esa línea, queremos convertirnos en un referente del desarrollo sostenible integral que permita la transformación del país», señala José Miguel Raffo, director en Perú de IASE.
La certificación en ESG (Environmental, Social and Governance) -dirigida a empresas, dueños de empresas, directores, accionistas, gerentes, colaboradores en general, docentes y alumnos- comprende la capacitación en desarrollo sostenible respecto al medio ambiente, inclusión social, prácticas anticorrupción, igualdad de género y buen gobierno corporativo a través de una metodología 100% online con cursos de máximo 40 horas, que emplea tecnologías de vanguardia para un aprendizaje eficiente, flexible y en constante proceso de actualización.
De la misma manera, el sector financiero puede optar por la certificación ISFS (International Sustainable Financie Specialist) y aquellos en el sector público o privado por la ISBS (International Sustainable Business Specialist). Ambas son consideradas como las certificaciones globales más deseadas y respetadas entre aquellos que buscan demostrar su compromiso con la práctica ética y competente de ESG. Además, simbolizan la excelencia y la máxima profesionalidad en ESG y sostenibilidad en todo el mundo.
«La crisis de la COVID-19 ha impactado a las empresas obligándolas a acelerar su proceso de transformación digital y a replantear los principios en los que basaban su gestión. Así, la apuesta por políticas medioambientales, sociales y de gobernanza -género comienza a imponerse en las grandes corporaciones. En este contexto, el rol de IASE toma una gran relevancia al ser la primera, y la única, asociación a nivel mundial que aspira a certificar a toda la pirámide poblacional en materia de ESG», comenta Raffo.
