Moldea tu cuerpo sin cirugía
Por décadas muchas mujeres han recurrido a la cirugía plástica para eliminar la adiposidad de su cuerpo, ahora gracias a los avances de la medicina estética pueden modelar su figura con tratamientos corporales no invasivos que permiten eliminar la grasa acumulada en zonas difíciles que los ejercicios ni dietas han podido disimular. La doctora Gilda Pérez, del Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma, explica en qué consisten los tratamientos y qué aparatologías utilizan para remodelar la silueta.
1. El Moldeamiento corporal se realiza utilizando diferentes tecnologías no invasivas sobre la superficie del cuerpo. Para ello, se ubica al paciente sobre la camilla, a continuación, se aplicará una solución de gel neutro sobre la piel y se realizará el procedimiento según indicación médica de acuerdo a la necesidad de cada paciente y esta puede realizarse en distintas en áreas como brazos, caderas, muslo, entre otras.
2. La combinación de los tratamientos ayuda a remodelar y reducir medidas en zonas donde exista áreas con grueso panículo adiposo. Esto no solo mejora el contorno corporal, también combate la flacidez y mejora la apariencia de la piel.
– Ondas coolwaves: Sistema de última generación que reduce medidas disolviendo la grasa y reafirmando la piel mediante la tecnología de microondas Coolwaves, que no daña la dermis circundante.
– Criolipólisis: Es una técnica de eliminación de grasa mediante la aplicación de frío hacia las células adiposas, la cual garantiza un resultado efectivo.
– Ultracavitación: Sistema que utiliza el ultrasonido para romper las células grasas en la superficie corporal.
– Radiofrecuencia EXILIS: Es un equipo de radiofrecuencia monopolar que trata el exceso de grasa, tensando y mejorando la flacidez de la piel.
– Ondas de Choque: Equipo que se basa en la aplicación de ondas acústicas radiales, que tratan la celulitis obteniendo óptimos resultados además también actúa sobre la grasa localizada, reduciendo el volumen y reafirmando los tejidos.
3. Antes de empezar con el tratamiento, el o la paciente debe pasar por una evaluación médica para que el especialista le recomiende la terapia más adecuada para su caso y le indique el número de sesiones necesarias para alcanzar los objetivos trazados.