La vida se ha visto afectada negativamente por la pandemia
La forma en que muchas mujeres trabajan y viven ha cambiado drásticamente desde el inicio de la pandemia provocada por el COVID-19. Según una investigación de Deloitte Global, señala que alrededor del 82% de las mujeres encuestadas consideran que sus vidas se han visto afectadas negativamente por la pandemia y, casi 70% de las mujeres que han experimentado estas disrupciones, están preocupadas por sus capacidades para progresar en sus carreras.
La encuesta de Deloitte Global, realizada a casi 400 mujeres profesionales en todo el mundo, revela el impacto que ha tenido la pandemia en el equilibrio de la vida laboral y personal, así como en el bienestar general, y resalta cómo el COVID-19 podría amenazar algunos de los avances logrados en los últimos años para conseguir la igualdad de género en el lugar de trabajo.
La pandemia está cobrando un alto precio en la vida diaria de las mujeres trabajadoras.
Las encuestadas que experimentaron cambios en su rutina diaria, como resultado de la pandemia, indicaron que ahora tienen más responsabilidades en las tareas del hogar (65%) y un tercio de ellas afirmó que su carga de trabajo ha aumentado.
Asimismo, la investigación evidenció que las principales consecuencias negativas fueron: impacto en el bienestar físico (40%); incapacidad para equilibrar los compromisos laborales y personales (40%); e impacto en el bienestar mental (39%).
Las mujeres con responsabilidades en el hogar enfrentan desafíos particulares, ya que aquellas que asumen el 75% o más de tales responsabilidades casi se triplican del 17% antes de la pandemia al 48% en el momento de la encuesta.
Además, la mayoría de las mujeres con hijos reportaron responsabilidades adicionales de cuidado de niños (58%) y responsabilidades de educación en el hogar (53%). Por otro lado, la mayoría de las mujeres sin responsabilidades de cuidado sienten la necesidad de estar siempre disponibles en el trabajo (53%) que aquellas con responsabilidades de cuidado (44%).
La investigación también destaca seis pasos que las organizaciones pueden tomar e implementar durante este momento crítico como: hacer arreglos de trabajo para una mayor flexibilidad y que sean parte de la norma, enfatizar la confianza y la empatía, brindar oportunidades de creación de redes y tutoría, implementar experiencias de aprendizaje que funcionen para la vida diaria de los profesionales, abordar los prejuicios inconscientes en la planificación de sucesiones y promociones, y hacer que la diversidad, el respeto y la inclusión sean valores no negociables en la cultura del trabajo cotidiano.