La importancia de un botiquín con productos básicos
Teniendo en cuenta que la comunidad escolar en general es vulnerable a ciertos accidentes cotidianos, de acuerdo a sus edades y las diferentes actividades desarrolladas durante la jornada escolar, manifestándose por medio de juegos, saltos, competencias, travesuras, entre otros. Se considera pertinente encontrar soluciones prácticas e inmediatas para estos casos. Es por ello que la directora de la escuela de Salud del Instituto SISE, Janeth Huamán, nos informa sobre la importancia del conocimiento, uso y conservación del botiquín de primeros auxilios.
Tras el inicio del año escolar es necesario que todos los centros educativos, y de ser posible cada salón, cuenten con un botiquín de primeros auxilios con medicamentos y material necesario para atender a niños y adolescentes en caso sufran algún malestar físico, accidentes o golpes.
El botiquín de primeros auxilios muy bien equipado es indispensable y no debe faltar en ningún colegio. Debería haber uno en todas las aulas, para atenciones primarias a los escolares que sufran accidentes, golpes, caídas, o molestias imprevistas como mareos, náuseas, dolores de cabeza o estómago, mientras se les traslada a un centro de salud, si lo necesitaran.
Un botiquín escolar debe contener medicamentos, material sanitario, instrucciones de primeros auxilios y teléfonos de emergencia, para brindar atención oportuna y apropiada a los niños y adolescentes.
Los medicamentos que no deben faltar son: analgésicos-antipiréticos para calmar el dolor o bajar la fiebre, como el Paracetamol y antiinflamatorios como el Ibuprofeno; material sanitario imprescindible: termómetro, tijeras de punta redonda, pinzas de depilar, guantes de látex, jabón líquido, alcohol, algodón, agua oxigenada (ayuda a detener hemorragias); y antisépticos como Povidona yodada o Clorhexidina para evitar infecciones. El suero fisiológico para limpiar heridas, gasa estéril para comprimir heridas o cubrirlas, vendas de gasa elásticas de diversos tamaños, esparadrapo, imperdibles, pañuelos triangulares para inmovilizar brazos (cabestrillo) o piernas, y mascarillas de protección facial.
Es importante guardar en el botiquín un manual de primeros auxilios y láminas explicativas con maniobras de reanimación cardiopulmonar, y posiciones de seguridad para niños accidentados.
Una lista de teléfonos de emergencia que incluya los números de los establecimientos de salud más cercanos y de los bomberos.
El botiquín escolar debe ser, de preferencia, una caja con asa transportable que cierre herméticamente pero fácil de abrir, estar ubicado en un lugar visible, seguro, fresco y seco, que no tenga contacto con la luz del sol y lejos del alcance de los niños.
Es conveniente que los profesores y auxiliares a cargo de los menores estén capacitados para un adecuado manejo del botiquín y para tomar la decisión correcta ante una emergencia. Hay que verificar que los medicamentos tengan fecha de vencimiento vigente, caso contrario, remplazarlos.