Gerente de Felicidad buscan generar satisfacción en el trabajo
Por años se ha relacionado el estrés con el trabajo. La mayoría de empleados consideran a su trabajo como una labor rutinaria y pesada, aunque también es una necesidad para tener estabilidad económica y garantizar el bienestar de sus familias. Sin embargo, en los últimos años la tendencia global es que la felicidad vaya de la mano con las laborales en oficina.
Por eso, cada vez más empresas implementan el novedoso cargo de gerente de felicidad. Estas personas serán las encargadas de generar en los empleados la sensación de satisfacción en sus horarios de trabajo y también hacerles recordar lo importante que son ellos para la organización. No como simples “peones”, sino como piezas fundamentales en la estructura empresarial.
Los que dirigen la gerencia de felicidad están encaminados a la preocupación por lograr que las personas que trabajan para ellos experimenten la sensación de bienestar, de logro interno. Quienes dirigen tienen la nueva visión de centrarse más en los vínculos con quienes trabajan con ellos y no verlos solo como piezas de un engranaje sino más bien como personas que tienen emociones y sentimientos.
Aunque se podría pensar que es un cargo innecesario o con poca relevancia, el especialista detalla que el bienestar en una empresa mejora cuando los trabajadores se esmeran en ser productivos. De ese modo, no solo el empleado se siente mejor, sino que toda la organización se convierte en una fuente de experiencias gratificantes, una comunidad en la que todos se benefician.
No solo se trata de aumentar el sueldo del trabajador o entregarle bonos económicos por su labor, sino de crear un entorno de felicidad dentro de su centro de labores. Las relaciones entre los empleados y el jefe deben ser menos rígidas o verticales, pues esto podría evidenciar un entorno sin confianza, cuando la nueva tendencia es mantener un clima cordial y cercano. Este es el camino de la construcción de una organización competitiva. Así, fortalecer la autonomía de los empleados en sus decisiones también es un factor a considerar.
¿Puedes ser un gerente de felicidad?
Si bien el nombre suena muy importante, no es necesario tener estudios específicos para poder asumirlo, aunque si debe cumplir ciertas características que le permita generar buenas relaciones con todos los empleadores y al mismo tiempo influir en ellos para que se sientan felices en su trabajo.
Adicionalmente, el especialista sugiere que todo aquel que desee ser un gerente de felicidad deba conocer de psicología, mejor si se especializa en la rama organizacional, pues permite tener estudios en personalidad, motivación y, sobre todo, valores, formación humanística que todo profesional debe tener. La psicología no lo resuelve todo, pero nada se resuelve sin ella.