Consejos para una Boca Fresca
La gastronomía peruana es motivo de gran orgullo debido a su exquisito sabor y meticulosa preparación. Sin embargo, como ocurre con cualquier plato delicioso, si no cuidamos adecuadamente nuestra higiene bucal, algunos alimentos pesados pueden ocasionar un problema común: el mal aliento o halitosis.
«La halitosis, es una enfermedad que afecta a un gran número de personas en todo el mundo. Algunas comidas, sobre todo aquellas que contienen mucha grasa o aderezos, pueden desencadenar una reacción en la boca que favorece el crecimiento de bacterias productoras de mal aliento», sostuvo Ítalo Funes Rumiche, exdirectivo del Colegio Odontológico del Perú.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 60% de la población mundial sufre o ha sufrido de halitosis en algún momento de su vida.
Y en el 90% de los casos, el mal olor proviene de la cavidad bucal. Cabe mencionar que también puede tener su origen en el sistema respiratorio o digestivo, pero con menor frecuencia.
¿Qué alimentos pueden desencadenar mal aliento?
Algunos alimentos que podrían desencadenar halitosis son:
– Ajo y cebolla, contienen compuestos que se absorben y pueden causar malos olores.
– Especias fuertes, como el curry o el comino, contienen aceites volátiles que pueden dejar residuos en la boca y causar un olor desagradable.
– Pescado y mariscos, los productos marinos, especialmente cuando están mal cocidos o en descomposición.
– Los productos lácteos, como el queso o la leche, pueden promover el crecimiento de bacterias en la boca, lo que a su vez puede contribuir al mal aliento.
– Café y alcohol, pueden provocar sequedad bucal, lo que reduce la producción de saliva y favorece el crecimiento bacteriano, causando mal aliento.
Cabe mencionar que, así como la cocina peruana y otras del mundo, suelen incluir una variedad de aderezos e ingredientes pesados, esto no quiere decir que causará mal aliento. Por lo tanto, tener una buena higiene bucal será fundamental para prevenir la halitosis, incluso al consumir alimentos pesados.
Ante ello, Funes Rumiche recomienda la siguiente rutina de higiene bucal:
– Cepillarse los dientes al menos tres veces al día: El cepillado adecuado y regular ayuda a eliminar los restos de comida y la placa bacteriana que contribuyen al mal aliento.
– Usar cepillo interdental: Ayuda complementar el cepillado regular y garantiza una limpieza completa.
– Enjuagarse la boca: Los enjuagues bucales con CPC (Cloruro de Cetilpiridinio) ayudan a reducir las bacterias en la boca y refrescan el aliento.
Se recomienda utilizar un enjuague bucal sin alcohol. Cabe indicar que, según la Academia Americana de Periodoncia, los enjuagues bucales son efectivos para controlar el mal aliento.
Finalmente, el especialista sostiene que es importante tomar estas medidas preventivas para reducir la incidencia de mal aliento y disfrutar de una boca fresca y saludable. Además de realizar visitas periódicas al cirujano dentista.
