¿Cómo disfrutar de este verano con una piel fresca e hidratada?
Mantener una piel saludable durante la estación más calurosa del año es uno de los desafíos que muchas personas desean lograr para repeler, principalmente, factores externos como: el clima seco, el aire acondicionado, el agua del mar, horas de exposición al sol, entre otros, que son perjudiciales para nuestra piel. Por ello, la hidratación profunda es una solución efectiva para minimizar problemas cutáneos que contribuyen a su sequedad y envejecimiento, logrando una mejora significativa de nuestra apariencia.
Para contrarrestar los efectos contraproducentes de los rayos solares, Úrsula Casanova, especialista del Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma, explica que la hidratación profunda es un tratamiento que brinda una solución integral con beneficios importantes como preservar funciones óptimas de la piel, aportar luminosidad y tersura, además de amenguar la visibilidad de las arrugas.
Adicionalmente, subraya que este tratamiento se distingue de métodos convencionales por su aplicación entre las capas de la piel, asegurando una acción efectiva y una absorción continua durante varios días. El ingrediente clave es el ácido hialurónico no reticulado que se combina con nutrientes específicos para lograr resultados óptimos. También, la versatilidad de la hidratación profunda permite su adaptación a diversos tipos de piel, ya sea grasa, seca, acnéica o sensible.
«Además de la hidratación externa, es necesario enfatizar la importancia de mantener una hidratación interna adecuada a través del consumo de agua. Integrar sérums hidratantes en la rutina diaria de cuidado de la piel también es recomendado para maximizar los beneficios de la hidratación profunda. Su aplicación puede personalizarse con ingredientes específicos y el tratamiento puede repetirse cada 6 o 9 meses, según las necesidades individuales de cada paciente», recomienda la doctora Casanova.
Por otro lado, indica que es importante el uso regular de protector solar cada 2 o 3 horas para prevenir el daño solar debido a que nuestra piel también puede estar expuesta al clima seco.
La especialista sugirió reemplazar el uso de jabones faciales por geles o emulsiones limpiadoras y una rutina de cuidado de la piel con la aplicación de sérums hidratantes, lo cual contribuirá a mantener la piel en óptimas condiciones.
Finalmente, la doctora Casanova refiere que con la hidratación profunda es posible enfrentar los desafíos del verano y lograr una piel radiante y saludable, independientemente de las condiciones climáticas.