Cinco consejos para liberarse del Síndrome de la mala madre
En tiempos en los que la presión social sobre las madres alcanza niveles sin precedentes, expertos en salud mental y maternidad comparten estrategias efectivas para combatir el denominado síndrome de la mala madre, un fenómeno que afecta a numerosas mujeres.
Este síndrome, que no debe confundirse con la depresión posparto, se caracteriza por sentimientos persistentes de culpa e inadecuación relacionados con la maternidad. A diferencia de los trastornos clínicos que requieren intervención profesional, este fenómeno está íntimamente ligado a las expectativas sociales poco realistas sobre la maternidad perfecta.
De acuerdo con un estudio publicado en el Journal of Child and Family Studies (2023), la prevalencia de sentimientos de culpa materna se ha intensificado significativamente en la última década. La investigación, realizada por la Universidad de Michigan, encontró que aproximadamente el 60% de las madres modernas experimenta sentimientos regulares de inadecuación en su rol maternal.
Experimentar dudas sobre nuestro rol como madres no nos convierte en malas madres. Por el contrario, reflexionar sobre nuestro desempeño maternal puede ser una señal de compromiso con la crianza, sostiene María Elena Escuza, directora de la Escuela de Psicología de la Universidad Norbert Wiener.
Las investigaciones indican que el 65% de las madres primerizas experimenta estos sentimientos durante el primer año de maternidad, mientras que un 45% continúa lidiando con estas emociones hasta que sus hijos alcanzan la edad escolar. Sorprendentemente, el 83% de las madres encuestadas admite que rara vez comparte estos sentimientos por temor al juicio social.
Para ayudar a las madres a navegar esta experiencia, la especialista recomienda cinco estrategias clave:
Cultiva pensamientos de autocomprensión: La maternidad es un viaje de aprendizaje continuo en el que los errores son inevitables y necesarios. Se recomienda adoptar una actitud comprensiva y amable hacia una misma, reconociendo que la perfección no es un estándar realista.
Establece límites saludables: Aprender a decir no y establecer prioridades claras es esencial. Las madres deben sentirse empoderadas para tomar decisiones basadas en el bienestar de su familia, no en las expectativas externas.
Construye una red de apoyo: La maternidad no debe vivirse en soledad. Es fundamental que las madres puedan construir y mantener conexiones significativas con otras mujeres, familiares y amigos que puedan ofrecer tanto apoyo emocional como práctico.
Prioriza el autocuidado: El bienestar personal no es un lujo, sino una necesidad. Dedicar tiempo regular a actividades que nutran el bienestar físico y emocional es fundamental para una maternidad saludable.
Celebra los pequeños logros: Cada día en la vida de una madre está lleno de pequeñas victorias que merecen ser reconocidas y celebradas, independientemente de su magnitud.
La revista Pediatrics publicó en 2023 un estudio que demuestra que las madres que participan en grupos de apoyo y practican el autocuidado consciente reportan un 40% menos de síntomas asociados con la ansiedad maternal y los sentimientos de inadecuación.
Es importante destacar que estos sentimientos pueden surgir en cualquier momento del viaje maternal, desde el embarazo hasta años después del nacimiento. La clave está en reconocer que estos sentimientos son comunes y que existen herramientas y recursos para manejarlos de manera efectiva, concluyó la especialista de la Universidad Norbert Wiener.