Bodegas peruanas redujeron ventas hasta en 50% por cuarentena
Las bodegas son establecimientos esenciales para la mayoría de provincias fuera de la capital. Todas ellas encargadas de comercializar alimentos y productos de primera necesidad para millones de hogares.
Estas, como otros rubros económicos, también se han visto duramente afectadas a medida que se ha alargado la cuarentena. Sin embargo, a pocos días de finalizarla; las bodegas se alistan para retomar sus actividades y tener la oportunidad de recuperarse y para ello van a tener que reinventarse.
En el Perú, la realidad que viven muchos bodegueros difiere mucho de lo que la mayoría puede imaginar pues, a la fecha, las ventas en estos negocios de barrio se han reducido en más del 50%, causando preocupación y zozobra entre los mismos.
Esta realidad, se debe a varios factores que devienen producto de la pandemia Covid-19; como lo son:
– Confinamiento extendido por casi 3 meses: Con la mayoría de la población acatando la cuarentena desde casa y el temor al contagio, las compras presenciales descendieron notablemente.
Horarios de atención restringidos: como se recordará al inicio del estado de emergencia – marzo de este año- el horario permitido de atención fue de 7 a.m. a 2 p.m. Este horario que finalmente se amplió en junio, afectó gravemente su rango de venta.
– Falta de capacitación tecnológica: Gran parte de las bodegas que funcionaba de manera tradicional. No estaban capacitadas para atender con mayor eficacia a sus clientes durante esta emergencia sanitaria. Nos referimos al tema de pagos electrónicos, publicidad en redes, servicios de delivery, etc.
– Problemas de abastecimiento: Ante un público urgido por comprar productos de la canasta familiar básica, el abastecimiento de los bienes más demandados ha sido difícil. La falta de stock y dificultades de reabastecimiento incluso han llevado a muchos establecimientos a tener que cerrar.
Es por ello que, desde hace 5 años, Industrias San Miguel (ISM) viene ofreciendo para todos los bodegueros el programa «Mejorando mi bodega», en el cual se les capacita y ofrece herramientas para una mejor gestión de su negocio. Dada la coyuntura por la que atravesamos, este año, Mejorando mi bodega ofrece todas sus charlas de manera virtual y de la mano con un gran aliado estratégico,
Centrum PUCP. Reconocidos docentes de esta casa de estudios y directivos de ISM, se unen para ofrecer -en cada charla- diversas alternativas, herramientas y soluciones para que bodegueros y pequeños emprendedores puedan enfrentar esta crisis.
Bajo esta misma línea de trabajo en pro del bodeguero y del pequeño emprendedor, ISM ha lanzado en redes la campaña: Juntos Podemos, Juntos Saldremos, cuyo objetivo es invitar a la población en general a abastecerse en las bodegas, apoyarlos y brindarles confianza.