Bill Gates: ¿Cómo evitar la próxima pandemia?
Al igual que ha pasado con anteriores pandemias y catástrofes, la COVID-19 ha cambiado la forma en la que vemos el mundo. En su nuevo libro, CÓMO EVITAR LA PRÓXIMA PANDEMIA, Bill Gates plantea los pasos que el planeta debe dar para prevenir otro desastre sanitario global como el que ha provocado la COVID-19. Y es que, aunque el mundo ha reaccionado a esta enfermedad de forma más rápida y eficaz que frente a cualquier otra en la historia, no se ha tomado en serio la labor de prepararse para evitar futuras pandemias. La buena noticia es que si se siguen una serie de recomendaciones el mundo no tendrá que volver a vivir un episodio tan dramático. El texto describe cómo podemos lograrlo.
A continuación, algunos de los puntos del plan de prevención de pandemias que propone Bill Gates:
– FORMAR UN EQUIPO DE PREVENCIÓN DE PANDEMIAS
Gates recomienda que los gobiernos de todo el mundo se pongan a trabajar en la creación de un grupo de expertos a nivel global que se ocupe de ayudar al mundo a prevenir pandemias. Y cabe preguntarse, ¿es que no existe un organismo de estas características en la actualidad? Pues lo cierto es que no, no existe una entidad con envergadura, alcance, responsabilidad y recursos necesarios para detectar brotes, responder a ellos y evitar que se conviertan en pandemias.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) es la única organización autorizada en este campo que puede actuar a escala global, pero está infra financiada y apenas cuenta con profesionales especializados en pandemias. También existen diversas organizaciones, pero se nutren en gran parte del trabajo de voluntarios. La más conocida es la la Red Mundial de Alerta y Respuesta a Brotes Epidémicos, GOARN por sus siglas en inglés. Además, los equipos regionales y nacionales no disponen de fondos ni de personal suficiente y ninguno está autorizado para actuar a escala global.
– NO MENOSPRECIAR LOS TRATAMIENTOS
Aunque al principio de la pandemia de la COVID-19 se pensaba que aparecerían tratamientos contra esta enfermedad y que a la larga 3 llegarían las vacunas, la realidad no fue esa. En solo un año ya había vacunas seguras y eficaces contra esta enfermedad mientras que los tratamientos tardaron en ver la luz. Si las vacunas no se hubieran desarrollado en este tiempo récord y a la vista de la tardanza de los tratamientos efectivos, la tasa de mortalidad habría sido mucho más alta, según señala el autor.
Los primeros antivirales obtuvieron luz verde a finales de 2021, por ejemplo Molnupiravir o Paxlovid, cuando gran parte de la población mundial ya había recibido al menos una dosis de la vacuna. Pero a pesar de que han pasado más desapercibidos, Gates señala que no son menos importantes. En futuros brotes pueden tener un gran potencial para salvar vidas y evitar que se colapsen los sistemas sanitarios.
– PREPARARNOS PARA FABRICAR MÁS VACUNAS Y MÁS RÁPIDO
Solo un año después de que se identificaran los primeros casos de COVID-19 el mundo ya contaba con múltiples vacunas, algo muy poco habitual en la historia de las enfermedades. Antes de la pandemia el récord en el desarrollo de una inmunización estaba en cuatro años, en esa ocasión contra las paperas. De hecho, el «gran milagro» de las vacunas contra la COVID-19 sucedió mucho más rápido de lo que muchos expertos pronosticaron. Por suerte se cumplieron los pronósticos más optimistas.
Pero Gates da un paso más allá. Según su plan de prevención de pandemias, las vacunas deben estar listas para todo el mundo seis meses después de que el patógeno haya sido identificado. Reconoce que se trata de una meta ambiciosa pero posible. Para lograrlo, la tecnología más prometedora es la de las vacunas ARNm. Según explican desde la agencia nacional de salud pública de Estados Unidos, estas inmunizaciones se desarrollan en laboratorio con materiales que están disponibles fácilmente, por lo que pueden fabricarse grandes cantidades de forma más rápida que con los otros métodos.
– ACABAR CON LA BRECHA SANITARIA
Aunque la respuesta a la pandemia fue más rápida y eficaz de lo que en un principio se esperaba, ya que a los dieciocho meses ya se habían administrado vacunas a más de tres mil millones de personas, las desigualdades han sido alarmantes. Tanto entre países como dentro de ellos. Un ejemplo: en Estados Unidos las personas negras, latinas y nativo americanas tienen el doble de probabilidades de morir de COVID-19 que las blancas.
Entre países, los habitantes de los estados pobres han tenido menos posibilidades de acceder a pruebas diagnósticas o tratamientos contra la COVID-19. Con las vacunas las diferencias son mucho más escandalosas. Por ejemplo, mientras que a finales de julio de 2021 el 50% de los estadounidenses se habían vacunado,en India solo llegaban a un 7% y apenas al 6% en Sudáfrica. Lo peor: se vacunó a gente de países ricos con bajo riesgo de enfermar de gravedad antes que a personas de riesgo en países pobres.
Así, este nuevo libro, Bill Gates sienta las bases para que gobiernos, científicos, empresas y ciudadanos creen un sistema que acabe con la amenaza de otra pandemia. Cada capítulo señala uno de los pasos que aún debemos dar para estar preparados. Pero tiene que ser ya, ahora que todavía el mundo recuerda lo horrible que ha sido la crisis del coronavirus. Una de las preocupaciones que Gates plantea en el texto es que cuando la COVID-19 remita, y con toda probabilidad se convierta en una enfermedad endémica, la prevención de pandemias quede en un segundo plano, o incluso en ninguno.
Este es un llamamiento intenso, exhaustivo y de suma importancia realizado por uno de nuestros más grandes y más eficaces pensadores y activistas.
El libro CÓMO EVITAR LA PRÓXIMA PANDEMIA se puede adquirir en formato físico en las principales librerías y supermercados a nivel nacional; y en su formato ebook en www.megustaleer.com/pe , Para mayor información sobre esta y otras publicaciones, sigue las de PENGUIN PERÚ.