Beneficios de contar con inteligencia operativa en la pandemia

La pandemia de COVID-19 generó impactos muy importantes en empresas de todas las industrias: por tratarse de una problemática que llegó repentinamente, hizo que muchas tuvieran que cambiar sus modelos de operación y hasta suspender de forma momentánea sus actividades.

Ante la crisis, hubo algunas firmas que usaron inteligencia operativa para contrarrestar el impacto negativo provocado por la pandemia y generar, incluso, beneficios que les ayudaron a mantenerse a flote, así como reducir las pérdidas durante este periodo.

Uno de esos beneficios, de acuerdo con OSIsoft, fue el impulso que se generó hacia el trabajo remoto durante este año de pandemia.

¿Cómo implementar de forma óptima el trabajo remoto?

Esta modalidad de trabajo desde luego no es nueva, pero la COVID-19 aceleró la necesidad de aprovechar aún más la tecnología para abordar desafíos relacionados a ella, como mejorar el manejo de costos, brindar seguridad a la salud de la fuerza laboral, y operar con menos personas sin ver mermada la productividad.

La inteligencia operativa brinda a las empresas la oportunidad de recopilar datos de todas las fuentes disponibles en sus instalaciones para posteriormente darles visibilidad en una plataforma, como PI System, que puede ser monitoreada de forma remota. De esa forma, el colaborador puede tener los datos críticos donde y cuando los necesite, para realizar un análisis operacional preciso sin importar si se encuentra lejos de la planta de producción.

Cabe mencionar que, de acuerdo con datos del U.S. Census and Bureau of Labor Statistics recopilados por OSIsoft, el trabajo remoto ha crecido en popularidad en un 91% en los últimos 10 años y para 2030 la demanda de esta modalidad de trabajo aumentará en un 30%.

¿Qué beneficios genera?

– Productividad: El 85 por ciento de las empresas, de acuerdo con datos de OSIsoft, asegura que su productividad ha aumentado como resultado de una mayor flexibilidad, otorgada por el trabajo remoto hacia sus colaboradores.

– Seguridad: El trabajo remoto proporciona un entorno laboral seguro y saludable en tiempos en donde deben evitarse las aglomeraciones.

– Ahorros: Ejemplo de esto es DTE Energy, empresa de energía con sede en Detroit, que instaló sensores inalámbricos y utilizó PI System para recopilar y compartir los datos generados por ellos de forma remota. Gracias a lo cual, eliminó anualmente 500 mil minutos de interrupción de sus clientes y ahorró alrededor de $25,000 dólares por cada circuito eléctrico que atiende.

– Recuperación de activos: La firma EDF Renewables, firma de generación de energía mediante fuentes renovables, encontró en la inteligencia operativa las soluciones necesarias para centralizar los datos de sus operaciones en un solo lugar. Monitorear esa data de forma remota le permitió ganar $700,000 euros por año en producción recuperada de todos sus parques eólicos.

– Tiempo: La empresa energética Outotec tenía muy poca visibilidad de los datos en línea y de su historial, además requería tener al personal dentro de las instalaciones para su puntual monitoreo. También había un problema respecto a lo aisladas que están sus distintas ubicaciones, lo que derivó en largos tiempos de respuesta a solicitudes de servicios.

Poner en funcionamiento el PI System les permitió tener una base de datos centralizada globalmente, que podía ser verificada y analizada desde cualquier lugar, sin importar lo aislado de una u otra ubicación. Esto les generó una reducción en los tiempos de respuesta y redujo la necesidad de viajar hacia las plantas para resolver problemáticas.

También acortó los tiempos de inactividad y permitió un despliegue más rápido de servicios.

Artículos relacionados

Back to top button