Alternativas no convencionales para la luna de miel

Mitad de año es una de las épocas escogidas por muchas parejas para llevar a cabo su matrimonio. No importa si la ceremonia es religiosa, civil o una unión simbólica adaptada a sus gustos y creencias personales, algo que nunca debe faltar es la denominada luna de miel, pausa viajera que realizan los enamorados para iniciar su vida en pareja.

Para aquellos novios que aún no han decidido su tipo de luna de miel, pero quieren vivir una experiencia distinta, la empresa de viajes Despegar, presenta algunas opciones alejadas de lo convencional, pero igualmente inolvidables:

Luna de miel en familia

Aunque pueda sonar extraña, esta es una tendencia en aumento, pues muchos recién casados ya tienen hijos y no quieren dejarlos por fuera de este viaje especial, convirtiendo así la luna de miel en el primer viaje oficial de la nueva familia.

Aquí lo importante es recordar que el motivo de viaje es la pareja, pero sin dejar de lado el entretenimiento de los menores, y para esto un destino que funciona a la perfección es la mágica París.

La ciudad luz siempre está lista para recibir a los enamorados, y sus calles se convierten en postales de recuerdo en pareja. Recorrer la torre Eiffel o los campos Elíseos será una aventura tan romántica como entretenida para toda la familia.

Al lado de los nuevos esposos, los niños también podrán vivir sus propias aventuras, gracias a la cercanía del mágico Disneyland París. Se puede acceder en tren desde París, lo que hará más cómoda la experiencia. Es muy recomendable adquirir las entradas de manera anticipada, al momento de reservar tiquete y alojamiento, pues se podrá conseguir un menor precio que comprando cada producto por separado.

Luna de miel en cuatro ruedas

Muchas parejas desean que su luna de miel no sea solo un viaje especial sino el viaje de sus vidas; por eso, quieren convertirlo en toda una aventura, disfrutando al máximo de su destino elegido. Recorrerlo en auto es una gran experiencia, sin embargo, también requiere planificación para garantizar que todo salga de la mejor manera. La luna de miel es el momento menos recomendable para improvisar.

«Aquí lo mejor es hacer un itinerario previo de viaje, contemplando las paradas que se harán y los días que se destinará a cada una. De esta forma, los recién casados podrán reservar con anticipación el vehículo y el hotel a su gusto y con toda la privacidad que merecen», comenta Inés Hochstadter, Country Manager de Despegar Colombia, Perú y Ecuador.

La preluna de miel también es una opción

Siguiendo la famosa premisa de “el orden de los factores no altera el producto”, cada día toma más fuerza esta tendencia de viajar previamente al matrimonio. En ocasiones se hace por disponibilidad de fechas y buscando temporadas más económicas, pero también hay quienes lo hacen como una forma de liberarse del estrés propio de los preparativos de boda, para llegar al día especial con toda la energía y la mejor actitud.

En este caso el plan no puede ser de relax total y quedarse en el hotel todo el día, porque terminarán revisando las listas de invitados y los demás detalles de la ceremonia. Por eso, funcionan muy bien los destinos que mantengan a la pareja ocupada descubriendo la ciudad y disfrutando actividades en pareja. Planear anticipadamente actividades para cada día, salidas y cenas nocturnas, permitirán concentrarse en disfrutar cada minuto de esta experiencia en pareja.

Luna de miel desconectados

Los que viven todo el tiempo conectados al mundo virtual, pueden encontrar muy reconfortante alejarse por unos días de celulares, televisores e internet.

Aunque es una decisión que se puede tomar en cualquier destino, resulta más placentero vivir esta experiencia apartados de las grandes ciudades y rodeados de naturaleza.

Si le llama la atención esta alternativa, un destino perfecto es la selva peruana. Esta hermosa y verde región cuenta con planes y actividades por doquier, así que los novios viajeros tendrán a su disposición largas caminatas llenas de aventura, con muchos lugares nuevos para sorprenderse y mantener entretenidos su mente y sentidos.