Recomendaciones para ganarle a la radiación este verano
Sin bien es cierto el sol es fundamental para preservar la vida en nuestro planeta, exponernos a este sin las medidas de protección adecuadas puede traer consecuencias irreparables.
Las quemaduras, la dermatitis y el cáncer -en el peor de los escenarios- son algunas de las alteraciones que pueden presentarse en nuestra piel cuando nos exponemos de manera irresponsable al sol. Esto ocurre cuando recibimos, a veces sin darnos cuenta, altos niveles de radiación ultravioleta (UV) por un periodo prolongado de tiempo, como al trabajar en espacios abiertos.
Es por estos motivos y, teniendo en cuenta que aún estamos en el mes de febrero, Khala Corporativo presenta las siguientes recomendaciones para ganarle a la radiación este verano:
Un peligroso rango de horas
¡No solo ocurre al mediodía! Mientras más vertical sea la posición del sol, más peligrosos serán sus rayos UV. Por ello, se recomienda que las personas eviten la exposición al sol entre las 10:00 AM y 4:00 PM, rango de horas durante el cual el índice de radiación alcanza los niveles más altos.
Ropa con protección UV
Las prendas adecuadas son determinantes para protegerte de la radiación. Se encuentren hechas de algodón o material sintético, siempre es importante que la tela no sea muy delgada. Si ves una prenda y al sostenerla puedes ver tus dedos a través de ella, descártala. ¿Quieres proteger tu piel? Busca ropa con máxima protección UV para cubrir la mayor parte de tu cuerpo.
El mito del color
A diferencia de lo que comúnmente se piensa, la ropa de color oscuro protege más que la de color claro. Si bien es cierto que colores como el negro pueden hacernos sentir una sensación de calor más intensa, los colores oscuros bloquean mejor la radiación que los colores pastel. Mientras más intensa sea la tonalidad, mejor protección proporcionará la prenda.
Usa bloqueador
El uso de bloqueador debe formar parte de nuestra rutina diaria. Lo recomendable es aplicar bloqueador solar sobre toda la piel descubierta cada dos o tres horas, siempre y cuando el Factor de Protección Solar (FPS) no sea menor a 50. No sacrifiquemos nuestra salud por cuestiones estéticas, estar bronceado no debe ser más importante que evitarnos daños irreversibles a la piel.