Culminó el Proyecto 356 World Rally Tour
"Las lágrimas de alegría deben correr de los ojos hacia las orejas y no hacia el piso", decía el legendario bicampeón mundial de rally Walter Röhrl. Unas lágrimas de ese tipo dejó escapar la piloto aficionada de rally Renée Brinkerhoff cuando conducía las últimas millas de las 356 (573 km) con las que finalizaría su Proyecto 356 World Rally Tour, un sueño que comenzó a forjarse en 2017 con La Carrera Panamericana, en México, y que en 2018 también recorrió el Gran Premio Caminos del Inca, en Perú. En total, recorrió más de 30,000 kilómetros en siete continentes a bordo de un Porsche 356 A Coupé de 1956 recaudando fondos para luchar contra el tráfico infantil.
"Conducía con poca visibilidad por el mal clima y con temperatura bajo cero grados Fahrenheit (-18° C), estaba fatigada y trataba de encontrar algo de calor con mi abrigo de capucha, los guantes, las botas, en fin, todo el equipamiento de invierno. El auto peleaba contra el agreste y traicionero hielo, así como contra el fuerte viento. Sus cilindros rugían cansados y algunos copos de nieve se veían dentro de la cabina. De repente, me di cuenta de que mis ojos dejaban escapar unas lágrimas de alegría. Estaba feliz porque sabía que pronto alcanzaría mi meta de correr con el Porsche 356 A seis rallys en siete continentes y por la labor que estábamos haciendo, y seguimos haciendo, con Valkyrie Racing para luchar contra el tráfico infantil", así describió Renée Brinkerhoff el final del Proyecto 356 World Rally Tour que culminó en diciembre tras recorrer unos 30,000 kilómetros.
La Antártica y sus condiciones extremas significaron el lugar definitivo para hacer oír su mensaje en favor de la niñez. El silencio ensordecedor de la belleza natural y temperaturas brutalmente frías, ayudó aún más a que sus voces fueran escuchadas. A pesar de todos los obstáculos y de un retraso de casi dos años debido a la pandemia, hasta importantes desafíos mecánicos durante su muy esperada expedición de una semana por el Continente Blanco, nada pudo detener al equipo de cinco personas mientras luchaban por su objetivo.
Adicionalmente al objetivo de conquistar la Antártica, el logro más grande es la determinación de Valkyrie Racing, y su fundación Valkyrie Gives para recaudar un millón de dólares para ayudar a niños víctimas de la trata de personas en todo el mundo. "Gracias a todos los que han contribuido y continúan apoyando estos importantes esfuerzos, estamos a más de la mitad de nuestro objetivo. Sin embargo, cuando alcancemos nuestro objetivo, no planeamos detenernos allí: tenemos muchos más desafíos por delante y les pedimos a todos aquellos con corazones compasivos que continúen ayudándonos, ayudando a aquellos que no pueden ayudarse a sí mismos. Todos somos responsables de estos niños", dijo Renée.
Renée y su hija Christina, a través de Valkyrie Gives, donan el ciento por ciento de cada dólar recaudado a diferentes organizaciones no gubernamentales de Brasil, Colombia, India, Kenia, Mongolia, Perú y Tailandia, entre otras entidades que luchan en todo el mundo para acabar con el tráfico de menores. Todos son proyectos altamente reconocidos que dejan un impacto positivo en la vida de los niños en riesgo. Desde el inicio de la fundación en 2017, y específicamente a través del programa antártico, Valkyrie Gives ha recaudado más de 556,000 dólares.
Su objetivo es superar con creces el millón de dólares en donaciones.