¿Cómo la tecnología puede ayudar a la agricultura peruana?
Hoy, a nivel mundial, ya se habla de la Agricultura 4.0, que se basa en la recopilación y análisis de datos sobre el campo y la situación meteorológica con el objetivo de mejorar la calidad de los cultivos, generar eficiencias y reducir las consecuencias en el medioambiente. Esto es posible con el uso de las nuevas tecnologías y softwares capaces de promover el ahorro de suministros, recursos y tiempo en un trabajo realmente exigente. Este tipo de tecnología ya está disponible en el Perú, gracias a Manuchar, empresa líder en la comercialización y distribución de insumos químicos, equipos y fertilizantes
«Hoy, contamos con una gran diversidad de sensores y equipos meteorológicos que se ajustan a las necesidades de los clientes. Por ejemplo, en Chile, hay heladas, ante esto, sus productos se ven afectados si no toman las medidas adecuadas, por eso necesitan tener puntos de monitoreo. En Brasil, quieren medir las lluvias. En Bolivia puede haber épocas de sequía o exceso de lluvias y, en el caso de Perú, ante la falta de lluvias en la costa, nos interesa más contar con un equipo que pueda monitorear el clima y suelo», explica Carlos Lucioni, Gerente de Agro en Manuchar.
Para brindar esta tecnología a la agroindustria peruana, Manuchar se ha convertido en el representante exclusivo de Pessl Instruments, marca austriaca presente en más de 80 países, enfocada en el desarrollo de soluciones tecnológicas para la gestión de riego de cultivos, monitoreo del clima prevención de riesgos para la agricultura. Todos estos avances tecnológicos ya pueden ser implementados en el agro peruano.
Gracias a la data recolectada por estos dispositivos, los profesionales a cargo de un campo pueden tomar decisiones más informadas, que les permitan proteger los cultivos de los elementos y las anomalías climáticas cuando sea necesario, garantizando así su seguridad y la inversión que han requerido.
«Desde los ingenieros agrónomos hasta los gerentes necesitan tomar decisiones día a día, pues los cultivos se desarrollan de acuerdo al suelo y el clima, la cantidad de horas de sol y la temperatura son factores que afectan el florecimiento de las plantas y el crecimiento de los frutos. Antes, la gente lo hacía de manera empírica. Pero ahora la tecnología avanza y todo se cuantifica», detalla Lucioni.
Una empresa agroindustrial actual puede incluso instalar una estación meteorológica en su campo de cultivo y acceder a la información en tiempo real -acerca de la temperatura, viento, lluvia, horas de sol, etc.- a través de una conexión a internet. De este modo, es posible monitorear el estado del campo y el clima de manera remota, sin necesidad de visitar constantemente la zona.
«Sabemos que cada cultivo necesita de condiciones específicas de humedad, temperatura y salinidad en el suelo para poder desarrollarse, por lo que, sin estos equipos, ¿Cómo podríamos determinar con exactitud la demanda hídrica, de temperatura o de salinidad del cultivo? La tecnología que ofrecemos a través de nuestra nueva representada, Pessl Instruments, ayuda a tomar decisiones sobre las actividades agrícolas en base a información certera y constante. Estos equipos y su avanzada tecnología son un gran aliado para el desarrollo sostenible de la agroindustria en el país», finaliza Lucioni.