3 claves para la toma de decisiones en las MiPyMEs

En toda mipyme (micro, pequeña y mediana empresa) es importante tomar las mejores decisiones frente a los clientes con el propósito de asegurar su permanencia en el mercado. Generalmente, una mipyme no cuenta con áreas de trabajo que se encarguen de tareas puntuales, como Marketing o Planeación, por lo que el emprendedor o el líder asume todas las decisiones de forma general.

Especialmente, ante situaciones complejas o problemáticas como la alta competitividad, Roly Gutarra, coordinador de Investigación de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP), recuerda que es necesario que en las mipymes se tomen decisiones que los ayuden a ser rentables y sostenibles.

Capacitación de los equipos de trabajo. Es importante que los líderes de la mipyme formen equipos de planeación. Esto no implica gastos excesivos ni infraestructura adicional. Los empresarios deben capacitar a sus colaboradores para visualizar los posibles escenarios y afrontar las futuras situaciones de riesgos u oportunidades. Ello facilitará la planeación como un proceso constante en la organización generando mejores decisiones de forma fluida.

Aplicación de la inteligencia estratégica. El empresario debe transformar la información en conocimiento. Es decir, toda la información que se encuentra debe procesarse en función a los requerimientos del negocio. Esto le permitirá tomar decisiones a corto plazo y mediano plazo. De igual manera, se debe generar un conjunto de habilidades en los colaboradores como saber buscar información y procesarla adecuadamente. El conocimiento permitirá seleccionar el aspecto empresarial más relevante para la toma de decisiones.

Toma de decisiones. Luego de conformar y capacitar al equipo de planeación, se recomienda tener en cuenta los siguientes pasos para una adecuada toma de decisiones:

– Identificar las variables del entorno de la mipyme y los actores estratégicos que forman parte de él. Esto implica realizar un diagnóstico con el propósito de conocer a la empresa.

– Visualizar estas variables en función al futuro; es decir, imaginar cómo evolucionarán las tendencias actuales del mercado, cómo va el crecimiento del e-commerce, la sostenibilidad, la virtualidad, etc. Asimismo, en este paso se deben establecer las posibilidades de crecimiento que tiene la mipyme.

– De todos los escenarios imaginados, se debe seleccionar el que más se adapte al negocio y generar estrategias para anticiparse a esa situación elegida. Ello implica también afrontar eventuales situaciones negativas a un corto o mediano plazo.