El sabor de los quesos europeos deleita los paladares peruanos

Hay pocas experiencias tan increíbles como probar algo nuevo y delicioso. Uno de los mayores placeres gastronómicos en el mundo es el producido al comer un buen queso, como es el caso de los europeos. Es un universo de sabores, aromas y texturas; que además al mezclarlos con los gustos típicos del país, se convierten en una fusión de experiencias únicas e innovadoras.

Cuando hablamos de quesos en el Perú, nuestra mente evoca vivencias y sensaciones de momentos agradables que compartimos con quienes más queremos. Los quesos, como parte de la gastronomía, son parte del colectivo popular del país. Tienen un lenguaje universal, que, tanto en Europa como en Perú, es un lenguaje romántico, un lenguaje que fusiona culturas, es el lenguaje del amor.

Podríamos decir que los peruanos amamos el queso, de hecho, en los últimos diez años, su consumo se duplicó para situarse alrededor de 4 kg por persona al año.

Esto se debe a que, todo peruano es un gran chef en potencia, constantemente estamos pensando en cómo podemos ser creativos con la comida y en ese sentido los quesos europeos, sobre todo los franceses que cuentan con una amplia variedad y alto atractivo gastronómico, pueden ayudar sobremanera, ya que se fusionan tan bien con nuestra cocina peruana que crean ese llamado Idioma del Amor.

Por ejemplo, podemos disfrutar de platos típicos de Perú con un toque de queso francés, como un solterito arequipeño con queso Brie, o preparar unas deliciosas conchitas a la parmesana con una pizca de queso azul Bleu d’Auvergne.

Estas son algunas de las posibilidades que nos ofrecen los quesos europeos, los cuales cuentan con una variedad de opciones y posibilidades que unidos a la gastronomía peruana hablan este idioma basado en el amor. Un idioma cargado de sensaciones agradables que nos van a llevar a probar nuevos sabores como las opciones que les ofrecemos a continuación.

Maridaje de panecillos peruanos y queso

Otro elemento que está siempre presente en la mesa es el pan. Ya sea en el desayuno o en el lonche, en nuestras celebraciones o en las loncheras de nuestros hijos; el pan siempre nos acompaña.

Los panaderos están creando nuevas y deliciosas variedades donde innovan e incluyen nuevos ingredientes locales para darles un toque diferente y original. La sal de Maras, los granos andinos, frutos secos, entre otros son parte de esta nueva propuesta de panadería artesanal peruana.

Hoy en día, con la llegada de una mayor variedad de quesos europeos a Perú y el boom del pan artesanal, se abre una excelente oportunidad para experimentar un maridaje entre estos productos. Acá te brindamos algunas sugerencias con cuatro tipos de estos quesos europeos para que comiences este viaje.

Camembert

El queso Camembert es delicioso. Su corteza tiene un sabor intenso, a setas y tierra húmeda, que se debe comer junto con el resto del queso. La pasta es dulce, untuosa, y recuerda un poco a la mantequilla, por lo que le va muy bien un pan chapla con chía y linaza. Otra deliciosa opción sería con un pan de centeno, ya que la acidez de este contrarrestaría su intensidad.

Brie

Este queso de textura cremosa es ideal para un pan de tres puntas o una baguette de trigo, incluso si es de finas hierbas. El sabor neutro de este tipo de panes resaltará las notas del Brie y es perfecto para untarse.

Emmental

El Emmental va muy bien con tostadas de pan. Si es un pan tipo campesino con granos andinos -como la kiwicha- o frutos secos -como nueces- mejor. Pero definitivamente la clave es tostarlo para tener ese elemento crujiente que complemente la textura de este queso.

Gruyère

Este queso tiene aroma suave, algo dulce parecido a la nuez, y su sabor consigue tener toques ligeramente picantes dependiendo del grado de maduración. Puedes colocar unos pedazos de Gruyère sobre rodajas de pan multigrano y llevarlo unos minutos al horno para que se derrita y gratine, simplemente delicioso.

Es así como de una manera muy sencilla, deliciosa y práctica los quesos europeos y los panecillos peruanos se combinan, hablando el Idioma del Amor.