Tips para usar de forma correcta el oxímetro
Ya casi se cumple un año desde que en nuestro país se reportó el primer caso oficial de una persona infectada por el virus de la COVID-19 y, durante este tiempo, hemos venido aprendiendo sobre el comportamiento de la enfermedad y las medidas de bioseguridad que debemos adoptar para prevenir el contagio y mantenernos sanos.
En ese sentido, una de las recomendaciones pertinentes frente a esta coyuntura tan complicada es tener un oxímetro en casa debido a que, la mayoría de los casos de COVID-19, pueden ser tratados en la casa y no requerir hospitalización por alguna complicación.
«Un oxímetro es un pequeño dispositivo que nos permite conocer cuál es el nivel de oxígeno en la sangre. Su importancia en estos tiempos radica en detectar de manera oportuna cuadros severos de COVID-19. En ocasiones, al inicio de la enfermedad, las personas no sienten dificultad para respirar, pero sus niveles de oxígeno pueden ir bajando lentamente y de forma silenciosa poniendo en riesgo su vida. Esto lo podemos prevenir chequeando los niveles de oxígeno en sangre con un oxímetro en casa», explica la Lic. Jocelyn Sánchez, docente de enfermería del Instituto Daniel Alcides Carrión.
Recomendaciones para el buen uso del oxímetro en casa
1. Limpieza del sensor. Todos los oxímetros cuentan con un sensor que debe mantenerse limpio para evitar lecturas erróneas. Para limpiarlo, se puede utilizar un paño con un poco de alcohol. Por ninguna circunstancia debemos mojar el dispositivo o sumergirlo en agua.
2. Guardemos reposo antes de usarlo. Es importante estar en reposo por cinco minutos antes de medir la oxigenación.
3. Uñas limpias. El sensor del dispositivo no funcionará si tenemos esmalte en las uñas, por lo que antes de usarlo asegúrate de tener las uñas limpias.
4. Medición. Para lograr una correcta lectura debemos mantener el dedo quieto por unos segundos hasta que el dispositivo lance el resultado. Recordemos que el nivel de oxigenación normal de una persona oscila entre 95% a 100%. Los adultos mayores suelen tener una saturación más baja, por lo que se considera normal entre los valores de 94% a 100 %.
La especialista del Instituto Carrión indica, además, que es muy importante buscar atención médica si nuestra saturación se encuentra por debajo de los rangos normales. Si tenemos la saturación fuera del rango normal, lo más importante es guardar la calma y buscar ayuda profesional. Recordemos que un reciente estudio1 en nuestro país demostró que los pacientes que se presentaron al hospital con menos de 90% de saturación tuvieron mayor riesgo de morir.