5 consejos para mantener sano el corazón
Según la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de muerte en el mundo. En la Región de las Américas, causan 1.6 millones de muertes al año, el 30% de ellas, prematuras, es decir, en personas de 30 a 69 años. Por este motivo, es necesario crear hábitos saludables que permitan prevenir problemas de salud como la hipertensión y los ataques al corazón.
Para el 2030 casi 23.6 millones de personas en el mundo morirán por alguna enfermedad cardiovascular, principalmente por cardiopatías y accidentes cerebrovasculares.
En el marco del Día Mundial del Corazón, que se celebra el 29 de septiembre, el Dr. Enrique Ruiz Mori, presidente de la Sociedad Peruana de Cardiología, brinda cinco consejos para cuidarlo:
– Tener una rutina activa: Evitar el sedentarismo no solo cuida el estado físico, sino que fortalece al corazón, baja la presión arterial y controla el peso.
– Comer de manera sana: Además de una dieta balanceada con frutas y verduras, es necesario mantener la hidratación durante el día.
– Controlar las emociones: La soledad o la ira pueden generar estrés en las personas, lo que aumenta la presión arterial, por lo que es importante saber cómo manejarlo. Algunas de las opciones son practicar yoga y dedicar tiempo y espacio a realizar actividades que relajen la mente y el cuerpo.
– Evitar el tabaco: Fumar acelera la frecuencia cardíaca y puede ocasionar alteraciones en el ritmo de los latidos, lo que a su vez aumenta el riesgo de accidentes cerebrovasculares. Además, el fumador activo y pasivo tienen más riesgo de sufrir un ataque cardiaco (infarto al corazón).
– Vacunarse contra la influenza: Tener influenza incrementa en diez veces el riesgo de tener un infarto(4). Las vacunas para la gripe y el neumococo disminuyen hasta en 45% este riesgo y previenen no solo neumonías, sino también eventos cardiovasculares.
Hoy más que nunca es necesario inmunizarse, ya que las vacunas contra infecciones respiratorias comunes son costoefectivas en población de riesgo, entre ellos, las personas que padecen enfermedades crónicas no transmisibles, como las cardiovasculares.