Merck apoya estudio global de la OMS
En el marco de la emergencia sanitaria global por la pandemia del COVID-19, Merck colabora con el proyecto Solidarity, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cuyo objetivo es encontrar un tratamiento eficaz y seguro para el coronavirus. Para ello, donó 290,000 unidades de interferón beta-1a, uno de los medicamentos más innovadores desarrollados por la compañía alemana en los últimos años.
Solidarity es un ensayo clínico en el que participan más de 100 países, incluido Perú, y que probará distintas opciones de terapia en pacientes hospitalizados con coronavirus, a partir de cuatro medicamentos: hidroxicloroquina, remdesivir, ritonavir / lopinavir e Interferón-Beta1.
Este último actualmente es utilizado para tratar pacientes adultos con esclerosis múltiple recurrente. A la fecha, su uso no está aprobado por ninguna autoridad regulatoria como tratamiento para el COVID-19 ni como agente retroviral.
De acuerdo con Vanessa Vértiz, gerente general de Merck Perú, la coyuntura actual los ha motivado a reinventar procesos, a creer aún más en la colaboración y a descubrir nuevas formas de seguir innovando y de llevar medicamentos a las personas que más lo necesitan. «En Merck, ahora más que nunca, estamos comprometidos con la salud de los pacientes y, por ese motivo, desde el inicio de la pandemia, hemos colaborado activamente en distintos proyectos globales de investigación, para poner a disposición de todos los ciudadanos del mundo un tratamiento seguro y eficaz contra el virus», explica.
Esta acción solidaria se complementa con otra donación realizada para el ensayo internacional Discovery, desarrollado por el Instituto Nacional de Salud e Investigación Médica (INSERM) de Francia.