Consejos para evitar la indigestión tras la cena navideña
La cena de Navidad es uno de los momentos más esperados del año; sin embargo, los excesos propios de esta fecha pueden generar malestar estomacal si no se toman ciertos cuidados. El consumo elevado de alimentos, las combinaciones poco habituales y el alcohol pueden desencadenar en problemas como la dispepsia, conocida comúnmente como indigestión. Por ello, Maritza del Castillo, nutricionista del Centro Médico de La Positiva Seguros, comparte una serie de recomendaciones para disfrutar de la Nochebuena sin comprometer la salud digestiva.
No llegues a la cena con el estómago vacío: Evitar comer durante el día para guardar espacio para la cena navideña es un error frecuente.
Esta práctica puede aumentar la ansiedad por la comida y llevar a comer en exceso. Se recomienda realizar comidas ligeras y balanceadas antes de la cena para llegar con mayor control del apetito.
Prioriza el consumo de proteína magra: Las carnes blancas, como el pavo, pollo o pescado, ayudan a generar saciedad y a mantener un mejor equilibrio nutricional durante la cena. Además, suelen ser más fáciles de digerir en comparación con las carnes rojas o los embutidos, cuyo consumo debería ser moderado debido a su alto contenido de grasas saturadas.
Equilibra las porciones: Una cena navideña saludable no implica dejar de disfrutar, sino controlar las cantidades. Una forma sencilla de controlarlas es utilizando el método del plato, el cual consiste en que la mitad del recipiente debe estar compuesta por verduras, frescas o cocidas, tratando de evitar aliños altos en mayonesa o vinagretas; una cuarta parte debe incluir proteínas y la cuarta parte restante, carbohidratos, priorizando los cereales integrales y las legumbres.
Cuida el horario de la cena: Aunque para muchos es tradición cenar a la medianoche, este hábito puede dificultar la digestión y generar malestar estomacal. Lo ideal es cenar entre las 8:00 y 9:00 p. m. Si la cena se realiza a las 12:00 a. m., se sugiere evitar acostarse inmediatamente después y realizar una actividad ligera, como una caminata breve, para favorecer la digestión.
Modera el consumo de alcohol: Las bebidas alcohólicas aportan calorías vacías y pueden irritar el sistema digestivo. Se recomienda optar por bebidas de bajo grado alcohólico, como vino o cerveza, evitar consumirlas con el estómago vacío e intercalar cada copa con un vaso de agua. Asimismo, es preferible no mezclar distintos tipos de alcohol durante la celebración.
