
El chequeo visual antes de viajar te puede ahorrar contratiempos
Las celebraciones por Fiestas Patrias motivan a miles de peruanos a movilizarse dentro y fuera del país, ya sea por turismo o reuniones familiares. Sin embargo, en medio de la planificación del viaje, pocas personas consideran la importancia de realizarse chequeos médicos preventivos, entre los cuales la evaluación oftalmológica resulta fundamental para prevenir molestias o complicaciones que puedan afectar su experiencia de descanso o recreación.
Por ello, antes de viajar, es aconsejable realizarse un examen visual integral. Algunas condiciones oculares pueden agravarse durante el trayecto o en el destino si no se detectan a tiempo, especialmente si la persona ha recibido algún tratamiento o procedimiento previo. Esta evaluación debe incluir la medición de la agudeza visual, el examen de fondo de ojo con pupila dilatada, la revisión del segmento anterior y el control de la presión intraocular.
"Estas pruebas permiten identificar a tiempo posibles alteraciones que podrían comprometer la visión durante el viaje, sobre todo en personas con glaucoma, retinopatía diabética o antecedentes de cirugías oculares recientes", explica el Dr. Juan Carlos Corbera, especialista de Oftálmica Clínica de la Visión.
El especialista brinda algunas sugerencias según el tipo de procedimiento realizado, ya sea por cirugía y enfermedad preexistente:
Cirugías
Cirugía refractiva: El paciente puede viajar sin inconvenientes, aunque se sugiere evitar zonas de gran altitud (más de 3,000 metros sobre el nivel del mar) durante los primeros 15 días posteriores a la intervención.
Cirugía de retina con gas intraocular: Está contraindicado viajar en avión dentro de los 45 días posteriores a la operación, ya que el gas puede expandirse con los cambios de presión y provocar hipertensión ocular.
Cirugía de catarata: Se puede viajar después de los 10 días, una vez completado el proceso de cicatrización.
Enfermedades preexistentes
Glaucoma o diabetes: El glaucoma es una enfermedad silenciosa que puede avanzar sin síntomas hasta comprometer seriamente la visión. Por ello, es fundamental asegurarse de que la presión ocular esté controlada antes de viajar. En pacientes con glaucoma de ángulo estrecho, se recomienda considerar una iridotomía periférica con láser previa al viaje, con el fin de evitar un posible episodio agudo.
En el caso de personas con diabetes y antecedentes de retinopatía, se sugiere realizar un control oftalmológico al menos cuatro semanas antes del viaje. Este debe incluir una tomografía de coherencia óptica (OCT), que permita evaluar la mácula, la retina y el nervio óptico.
Si se detectan signos de progresión, podría ser necesario realizar tratamientos como la fotocoagulación con láser antes de emprender el desplazamiento.
Recomendaciones para cuidar la salud ocular durante el viaje
- Llevar gotas lubricantes en presentación líquida o en gel.
- Evitar el uso de lentes de contacto en vuelos largos, especialmente en ambientes con aire acondicionado.
- Contar con una receta actualizada de los medicamentos oftalmológicos que se utilizan.
- Empacar un par de lentes de repuesto, por precaución.



