Día Mundial de la Lucha Contra el Asma
Según la Organización Mundial de la Salud, casi 235 millones de personas padecen de asma en el mundo, y aunque los niños son la población más vulnerable, esta enfermedad crónica puede presentarse a cualquier edad, exigiendo una atención oportuna y prolongada para alcanzar un estado de salud que permita realizar una vida normal.
Debido a la pandemia por COVID-19, los pacientes asmáticos han tenido un incremento sobre los cuidados respecto a su salud, ya que el virus ataca directamente al aparato respiratorio, ocasionando mayores riesgos de complicaciones.
Al respecto, la Dra. Nandy Vega, subdirectora médica de los Centros Médicos de MAPFRE, resaltó la importancia de tomar medidas preventivas y aprovechar la cobertura de un seguro de salud para detectar a tiempo el asma y tratarla. «El asma puede manifestarse con síntomas como la tos, sibilancias, sensación de falta de aire y opresión en el pecho. Un estudio de espirometría detecta la enfermedad y, a pesar de su potencial gravedad, puede ser controlada eficazmente mediante un tratamiento apropiado.
En el marco del Día Mundial de la Lucha Contra el Asma, la Dra. Vega comparte recomendaciones para mejorar la calidad de vida de los pacientes asmáticos y reducir la frecuencia de una crisis:
Mantén un tratamiento regular. Es fundamental seguir el tratamiento de mantenimiento prescrito por tu médico, incluso cuando te sientas bien. Esto ayuda a reducir la inflamación en las vías respiratorias y prevenir ataques repentinos. Es importante contar con un seguro de salud como el de MAPFRE que permita llevar el tratamiento sin contratiempos.
Identifica y evita desencadenantes. Aprende a reconocer los factores que desencadenan tus ataques asmáticos, como alérgenos, humo, contaminantes atmosféricos o cambios climáticos. Evita la exposición a estos desencadenantes tanto como sea posible. En cuadros de asma moderado y severo es recomendable la vacunación anti-influenza y antineumocócica.
Reconoce los signos de advertencia. Estar atento a los signos tempranos de un posible ataque asmático te permite actuar con prontitud. Si experimentas sibilancias, tos persistente, dificultad para respirar u opresión en el pecho, busca atención médica de inmediato.
Trata las crisis con rapidez. Ten siempre a mano tu medicación de rescate, como inhaladores de acción rápida, y úsala según lo prescrito por tu médico en caso de emergencia. No subestimes la importancia de actuar rápidamente durante un ataque asmático.
Practica deporte regularmente. Siempre que tu asma esté bien controlada, el ejercicio puede beneficiar tu salud respiratoria. Consulta con tu médico sobre el tipo de actividad física más adecuada.
Recuerda que el control del asma es un esfuerzo conjunto entre tú y tu equipo médico. Una comunicación abierta con tu médico, así como seguir los consejos de un especialista garantizan una vida más saludable y activa, incluso con asma.