La economía circular como estrategia 360
Este 17 de mayo se celebra el Día Mundial del Reciclaje, una fecha prioritaria para la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), que tiene como objetivo generar conciencia y educar acerca de la importancia que tiene tratar los desechos como corresponden, para no contribuir al cambio climático, y así proteger el medio ambiente.
Actualmente, la humanidad utiliza recursos equivalentes a 1,6 planetas para mantener su modo de vida actual, es decir se consumen muchos más recursos de los que la tierra es capaz de proveernos. Lo que nos enfrenta a la necesidad de tomar medidas para reducir el calentamiento global y transformar el modelo económico de «comprar, consumir y tirar» a una economía circular y sin residuos, que se centre en utilizar mejor los recursos, extrayendo su máximo potencial y evitando el despilfarro. En el caso de los sistemas de distribución de energía eléctrica, este modelo implica el diseño de productos duraderos que puedan modificarse, actualizarse, repararse, reutilizarse y modernizarse, reduciendo al máximo el despilfarro e incrementando la vida útil de los recursos.
En Perú, se generan 21,658 toneladas de residuos al día, de los cuales el 44 % se produce en Lima Metropolitana y el Callao y solo el 1.9 % de los residuos municipales son reciclados, según la ONG Recicla Latam. Se sabe también que desde el 2011 el MINAM viene implementando un Programa de Segregación en la Fuente y Recolección Selectiva de Residuos Sólidos en viviendas urbanas a nivel nacional y en el 2020 implementó la Hoja de Ruta hacia una Economía Circular en el Sector Industria.
En este sentido, es importante destacar acciones como las que llevan a cabo organizaciones como Schneider Electric, empresa líder en la transformación digital, gestión de la energía y automatización, que han implementado medidas con las cuales están en proceso de evolución hacia un modelo inteligente y ambientalmente responsable, teniendo como referencia la economía circular.
Algunas de las metas que se propuso la compañía están englobadas en cinco parámetros, que buscan ser alcanzadas en el 2025:
Materia Prima: Aumentar el contenido de material verde en sus productos al 50%
Diseño de producto: Aumentar los ingresos de los productos cubiertos con Green Premium al 80% para 2025. Objetivo que ya fue logrado en 2023.
Fabricación: Mejorar en un 15% nuestra eficiencia energética y reemplazar el 33% de la flota de vehículos corporativos a vehículos eléctricos. Por otro lado, la compañía busca implementar programas locales de conservación y restauración de la biodiversidad en todas las instalaciones y obtener la certificación Waste to Resource. Por último, poner en marcha un plan de acción de conservación de agua para el 100% de las oficinas o plantas en áreas con escasez de agua.
Distribución: Asegurar que todos los empaques primarios y secundarios estén libres de plástico de un solo uso, y utilicen cartón reciclado.
Usuario Final: Evitar 420.000 toneladas métricas de consumo de recursos primarios a través de la recuperación de equipos al final del uso desde 2017.
En esa misma línea, el pilar principal de la estrategia de circularidad de Schneider Electric es el EcoDesignWay, un proceso que se aplica al desarrollo de todos los productos nuevos. El proceso permite las compensaciones correctas entre el impacto ambiental a lo largo del ciclo de vida de los productos, lo que permite coordinar los esfuerzos en toda la cadena de valor. En complemento al EcoDesignWay, se creó el programa Green Premium en 2008, creado para brindar a sus clientes productos más sustentables y ser transparentes con la información ambiental.
Inicialmente, los esfuerzos del programa se centraron en el cumplimiento de las normativas ambientales más rigurosas, luego en la transparencia de los datos (a través de Perfiles Ambientales de Producto PEP e Instrucciones de Fin de Vida). En los últimos años, se han realizado esfuerzos adicionales para desarrollar un programa más centrado en el cliente, ayudando a los clientes a diferenciar mejor las ofertas basadas en sólidas propuestas de valor ambiental.
Además de incorporar la transparencia a través de Check a Product, Schneider integró nuevas propuestas de valor de durabilidad, como el programa de devolución en Green Premium. Por ejemplo, los clientes que hayan comprado una de las fuentes de alimentación ininterrumpida (UPS) de APC tienen acceso al reciclaje gratuito cuando la batería del producto llega al final de su vida útil. En 2021, este servicio recolectó alrededor de 14.000 toneladas de baterías en todo el mundo para su reciclaje.
Sostenibilidad en las plantas
En los centros de producción de la compañía en Sudamérica se han dado grandes avances en los últimos cinco años con relación a la tasa de recuperación de residuos, la cual creció del 92% al 96%. Siete filiales en la región cuentan con la certificación Waste to Resource, categorización establecida por el Grupo con la que se busca recuperar al menos el 99% de los residuos generados.
Son elementos e iniciativas que ofrecen importantes beneficios y resultados en materia de reciclaje y economía circular. Por ejemplo, de 2021 a 2022, en todas las plantas de Sudamérica, se ha logrado una importante reducción del 20% en la intensidad de generación de residuos (g/h: gramo de residuo generado dividido por horas trabajadas).