Claves para formalizar un negocio

En Perú existen muchos emprendimientos creativos e innovadores. Según estudios realizados por Ipsos Global @dvisor, mediante una encuesta online aplicada en 2022 a más de 20 000 personas conectadas a internet en 28 países, Perú y Colombia tienen la proporción más alta de personas que dicen haber iniciado un negocio. Sin embargo, otra característica latente en estos países es la informalidad. De acuerdo a un estudio realizado por la Asociación de Emprendedores del Perú (ASEP), existe un promedio de siete millones de emprendimientos informales en el país.

Maycol Baldeón Palpa, coordinador de la carrera de Administración de Negocios Internacionales de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP), considera que una de las razones de la informalidad es el desconocimiento y la mitificación del proceso de formalización como burocrático y complicado.

«La formalización no es difícil. Puede ser lenta, pero es un proceso gradual como parte del progreso de un emprendimiento que brinda diversos beneficios», declara. Entre ellos, destaca el orden financiero, que ayuda a llevar un control de ingresos, préstamos por parte de bancos, el reconocimiento legal de vacaciones y, además, contribuir al fortalecimiento y crecimiento de nuestro país.

El coordinador de la UTP comparte cuatro consejos a tener en cuenta al formalizar un negocio:

Diagnóstico. Lo primero que se debe realizar al lanzar un negocio es analizar el entorno y evaluar algunos factores como la competencia, la necesidad de compra del producto o contratación del servicio que se ofrecerá y profundizar en las características del público objetivo: edades, estilo de vida, intereses, valores, actitudes, etc. Esto permitirá detectar a los potenciales consumidores y apuntar las estrategias hacia ellos.

Reserva de nombre. Una vez que se tenga claro qué ofrecer, a quiénes, de qué manera y cuáles serán los diferenciales, se puede elegir un nombre para que esté legalmente disponible y realizar la reserva del mismo en Registros Públicos. Se recomienda que el nombre sea de fácil recordación, creativo y que se vincule de alguna forma al producto o servicio.

Escritura pública. Luego de haber reservado el nombre, se tendrá que elaborar una minuta, con la ayuda de un abogado, si es necesario, en la que se definan acuerdos como la composición del capital social de la empresa, nombre del o los representantes legales, entre otros datos. Luego, se deberá llevar a un notario para su elevación a escritura pública e inscripción en Registros Públicos.

Aspectos financieros. Los emprendedores deben trabajar constantemente en la capacidad de ahorro. Formar este hábito es importante porque permite atender futuras emergencias.

Artículos relacionados

Back to top button