Coronavirus: Distribución de GLP es un servicio esencial
Ante las intervenciones de serenos municipales, policías y militares a las unidades de transporte de GLP a granel, la Sociedad Peruana de Gas Licuado (SPGL) desea precisar a la opinión pública lo siguiente:
Conscientes de nuestro compromiso con el Perú, nuestro gremio respalda las medidas adoptadas por el Gobierno para hacer frente al avance del COVID19 y ratifica que las empresas que forman parte de la SPGL, continuarán abastecimiento a los hogares, hospitales, clínicas, supermercados y otros autorizados, que utilizan diariamente el GLP como elemento esencial para su funcionamiento.
Sin embargo, serenos municipales, policías y militares, han venido interviniendo e inmovilizando las unidades de transporte de GLP a granel, afectando el abastecimiento requerido por los usuarios de instalaciones con tanques centralizados, en Redes de Distribución, no obstante ser uno de los servicios esenciales reconocidos en el Decreto Supremo 044-PCM, que ordenó el actual Estado de Emergencia, y estar exceptuados de toda restricción horaria por el DS 046-PCM, y ratificados por el Ministerio de Energía y Minas (MINEM) y OSINERGMIN.
En el país existen, más de 900 instalaciones autorizadas como Redes de Distribución de GLP, con tanques centralizados, la gran mayoría de estos son de departamentos de vivienda en edificios o condominios, que en la situación actual, se encuentran plenamente ocupados con consumos y consecuentes demandas de GLP para su uso diario, por eso es necesario abastecer estos tanques en forma periódica.
También existe una cantidad de instalaciones en hospitales, clínicas, centros de salud, hogares de ancianos y otros, además de supermercados, panaderías y plantas de tratamiento y elaboración de alimentos de primera necesidad que en el marco de la normatividad establecida, deben seguir funcionando.
Ante esa circunstancia, solicitamos el apoyo de las autoridades para continuar con nuestras labores de distribución con vehículos de transporte de GLP a granel, que cumplen con las normas legales y de seguridad, y no poner en riesgo la continuidad de subsistencia básica de hogares y centros autorizados, a través de una distribución y abastecimiento programado, del GLP como combustible.