La eficiencia energética y el valor que posee en la minería
A lo largo de mucho tiempo, el trabajo de la minería se ha desarrollado con una mirada que, básicamente, ha apuntado hacia la productividad; ello ha permitido la generación de crecimiento y el impulso de las zonas donde esta actividad ha desarrollado sus labores.
Parte de ese avance se dio a través de la adoptación de tecnologías, las cuales han permitido no solo brindar mayor seguridad, entre otros aspectos, sino también el ser parte de un esquema multisectorial que trabaja en pro de un futuro que provea lo mejor y, sobre todo, lo más eficiente.
A pesar de ello, es ineludible que, como en toda industria, se empleen recursos naturales, como la energía, teniendo una presión adicional por la racionalización u optimación de estos elementos.
Dentro de Latinoamérica, los países mineros están impulsando un trabajo sostenido en la materia y es liderado, básicamente, por Chile, Argentina, Bolivia y México, aunque ello no implica que los demás integrantes de la mencionada región obvien el objetivo final: eficiencia energética en minería.
En el caso del Perú, en noviembre de 2021 se renovó el compromiso respecto a la medida de apresurar la transición energética con la adopción de energías renovables, pues más que solo trabajar con recursos limpios, el Osinergmin sostuvo que solo el 5% de energía en el país es generada a través de fuentes renovables no convencionales.
Sergio Ferrari, director del segmento de Minería, Minerales y Metales para SAM en Schneider Electric, explica que la descarbonización global depende, en gran medida, de la producción sostenible de minerales y materias primas. Un sector minero y metalúrgico, próspero y saludable, es crucial para la economía global y para apoyar la innovación de nuevas tecnologías y materiales necesarios, los cuales contribuyan con la reducción del cambio climático, la protección del medioambiente y la economía circular.
«Schneider Electric está desarrollando soluciones inteligentes de administración de energía, para ayudar, a empresas y consumidores, a monitorear y controlar el uso de energía de manera eficiente. La tecnología tiene un papel fundamental que desempeñar a favor de las empresas mineras», sostuvo.
El análisis global sobre el crecimiento de los ingresos y la rentabilidad de las empresas industriales muestra que aquellas con una estrategia comprometida y continua, basada en la sostenibilidad combinada, con una agenda de transformación digital financiada a largo plazo, superan considerablemente a sus competidores.
La digitalización, con foco a eficientizar procesos y consumos energéticos, según manifiesta el especialista de Schneider Electric, será el mayor impacto en las minas durante la próxima década.
Si las empresas no se adaptan, dejarán de ser competitivas ante compañías que ofrecen el mismo producto, en un mismo mercado.