8 curiosidades de El problema de los 3 cuerpos

En el intrigante y vasto universo del problema de los 3 cuerpos yace un misterio tan profundo como los confines del espacio mismo. Como las estrellas que titilan en la noche, esta serie y el enigma que guarda consigo exige ser contemplado una y otra vez para desentrañar sus ocultos matices y hallar curiosidades de delante y detrás de la pantalla. Sigue sumergiéndote en el abismo de lo desconocido mientras te presentamos una lista de 8 curiosidades sobre la producción.

El logotipo de El problema de los 3 cuerpos está escondido en distintas superficies a lo largo de la serie. Por ejemplo, está bordado en las telas y las borlas del vestuario; tallado en rocas; aparece en la empuñadura de las armas, en la arquitectura y en muchos otros lados.

En la vida real, el actor John Bradley es hincha del club de fútbol Manchester United. Para divertirse, los guionistas crearon a Jack, su personaje, como un gran fanático del Manchester City. El reloj, el Rolls-Royce y algunos sectores de su casa son del azul característico del Manchester City.

Para el equipo encargado de las prótesis, crear el cuerpo deshidratado y aplastado de la discípula fue una de las tareas más exigentes de toda la serie. Hicieron dos versiones. También fabricaron más de ochenta cuerpos deshidratados.

Bramshill House, la locación para Wychwood Manor, es supuestamente una de las casas más embrujadas de Inglaterra. Para interpretar a Sophon y crear su postura, Sea Shimooka estudió los movimientos de los flamencos y las grullas.

Bobak Ferdowsi, consultor de la NASA en la serie, aparece como él mismo en el episodio 108 llevando adelante una cuenta regresiva durante una escena crucial.

Antes de comenzar el rodaje, Jess Hong y Jovan Adepo visitaron la Universidad de Oxford. Recorrer el campus y hablar con algunos de los estudiantes los ayudó a imaginar cómo los Cinco de Oxford se habrían hecho amigos y el contexto en que se habrían conocido y vivido.

El elemento más complicado que creó el equipo de diseño de vestuario fue la tiara del papa Gregorio XIII. Investigaron mucho cómo se tenía que ver, ya que es una tiara que han usado todos los papas a lo largo de los siglos, así que ha tenido varias encarnaciones. En un momento, se arrancaron las joyas de la tiara y, con ellas, se le fabricó una corona a Napoleón. Tenían que tener un aspecto tan opulento que daba la sensación de ser una reliquia invaluable de la Iglesia Católica. Tuvieron que dedicarle mucho tiempo y recursos y, a la vez, lograr que el actor pudiera usarlo.

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