7 recomendaciones para que el primer día de clases sea gratificante

La primera infancia es una etapa de cambios y nuevos desafíos, además de ser una etapa determinante para el desarrollo posterior. Por ello, es importante ser conscientes y estar al tanto de todas las experiencias que tenga el niño/a, porque todo influirá en su desarrollo.

El primer día de clases posiblemente se convierte en un desafío para los padres, pero es importante que todos en casa nos preparemos con anticipación. En el primer día de clases, nuestros hijos tendrán diferentes conductas como llantos, rabietas, gritos; en algunos casos, es una forma de expresar sus emociones como el miedo a lo desconocido, tristeza por separación, pero este tipo de conductas deberán irse en poco tiempo.

Por ello, la profesora Karen Pérez, docente de Psicología de la Universidad Continental, brinda 7 recomendaciones para preparar a los más pequeños para el primer día de clases y hacer de esta experiencia, una experiencia satisfactoria y hasta divertida.

1. Socialización: El desarrollo social del niño se basa inicialmente en la relación madre-hijo. Si es positiva, las relaciones posteriores serán adecuadas, pero si la relación es negativa las otras relaciones no siempre serán adecuadas. Es importante entender que los vínculos con los cuidadores principales (padres) será un determinante para el desarrollo socioemocional de nuestros hijos. Fomentar el desarrollo adecuado de habilidades sociales permitirá que el niño pueda aprender y expresar sus emociones, manejar su frustración y desenvolverse de forma natural con los demás.

2. Seguridad: El preescolar es una etapa donde el niño/a deberá desenvolverse con independencia y autonomía. Es importante que el padre/madre ayuden al niño a desarrollar esa confianza en las actividades que realiza.

3. Generar hábitos: Es importante que nuestros hijos aprendan a tener un horario que incluya un descanso adecuado, que los niños duerman las horas necesarias según su edad, tener un espacio adecuado para el ocio y para los estudios, así como una alimentación sana y nutritiva.

4. Estimular: Reconocer a nuestros hijos con palabras y/o gestos es muy importante. Preguntarles cómo les fue, qué hicieron, cómo se sintieron ayudará a que el niño/a pueda sentirse acompañado, podrá absolver dudas y desfogar toda su experiencia.

5. Enseñar la responsabilidad: Es importante que los niños, desde muy pequeños, aprendan a organizar sus tiempos. Por ello, hacer un horario visible y con participación activa del niño es ideal, incluyendo sus actividades tanto educativas como de ocio.

6. Reglas y valores: Recordemos que la educación comienza en casa, por lo tanto, es importante que nuestros hijos entiendan las reglas de convivencia, enseñar normas como la tolerancia, el respeto y la empatía desde edades tempranas es indispensable.

7. Cuidar la salud mental: Estar al tanto y vigilantes de los miedos repentinos y exagerados, problemas de sueño y alteraciones del comportamiento, así como la ansiedad, tristeza o depresión infantil que puede aparecer en algunos niños/as.

Según la profesora Karen Pérez, es importante brindar a los niños experiencias significativas, y un entorno de protección, cuidado y lleno de afecto por un entorno familiar. Es clave comprender la importancia del apoyo familiar, por lo que debemos desarrollar estrategias para hacer que su ingreso a la etapa preescolar sea gratificante y hasta inolvidable.