4 consejos para comprar o canjear un pavo
A causa de la pandemia, este 2020 los peruanos celebrarán la Navidad tomando precauciones adicionales para cuidar de sí mismos y de los que más quieren. En ese contexto, la cena navideña se deberá realizar siguiendo las nuevas normas de convivencia, pero seguirá siendo una oportunidad para compartir en familia.
Por ello, expertos de Ransa brindan cuatro consejos con la finalidad de celebrar en esta fecha especial disfrutando del infaltable pavo al horno que coronará la mesa en nochebuena.
Canjea tu pavo por delivery: La clave será anticiparse y abastecerse con tiempo para evitar aglomeraciones. Lo ideal será programar su entrega en la puerta de casa con días de adelanto. San Fernando, la marca emblema de la cena navideña, por ejemplo, trabaja con Ransa este año el delivery de pavos en los hogares de Lima Metropolitana y Callao, asegurándose de cumplir con todos los protocolos de salud y seguridad, y manteniendo los productos congelados en unidades de carga seca.
Mantén una distancia segura al realizar compras: Si esperaste hasta el último momento y no tienes mayor alternativa que ir a una tienda por el pavo, es importante que se respeten en todo momento las medidas indicadas en los establecimientos y se guarden distancias necesarias para que esta fecha la pases con buena salud y junto a los tuyos. Recuerda que es preferible que lleves una bolsa con alta resistencia.
Elige la cantidad de pavo ideal: ¿No estás seguro de cómo calcular el peso que debe tener el pavo? Recuerda que este debe ir acorde con las necesidades específicas de cada hogar, aunque se puede tener en cuenta un aproximado de un kilo por comensal, teniendo en la cantidad de su consumo y la merma natural por la cocción de un ave. No obstante, no hay que tenerle miedo a exagerar, ya que se dice que esta ave es un excelente banquete por su gran porcentaje proteico y menor grasa.
Conserva el pavo y descongélalo correctamente hasta la fecha de consumo: Una vez que está en posesión de quien lo vaya a cocinar, los expertos de logística en cadena de frío que trabajan en Ransa recomiendan que un alimento perecedero como esta ave debe mantener una temperatura mínima de -18 °C para preservar su inocuidad y buen sabor. Ya sea que lo hayas recibido en la puerta o traído directamente del punto de venta, consérvalo en el freezer hasta que sea indispensable descongelarlo para iniciar su preparación. Para descongelarlo, con cuatro horas por kilo aproximadamente dentro de la parte más baja del refrigerador será suficiente para mantener sus propiedades nutritivas y jugosidad.
